Son muchos los elementos que deben considerarse al preparar la inhumación o incineración de un ser querido. En muchas ocasiones, delegamos en otros (la propia funeraria o nuestra aseguradora, en caso de tener una póliza de decesos) estos trámites.
Puede ocurrir que, en el momento de realizar el pago, no entiendas de dónde ha salido tal importe. Desde Kolondoo ya te adelantamos que este gasto es elevado, y que en función de tus elecciones será más o menos caro. Pero, ¿por qué?
Qué incluye
Antes de ver cuánto cuesta un sepelio, es importante conocer de dónde viene ese precio. Es decir, qué servicios están incluidos, pues de ellos depende bastante el coste final.
Los servicios funerarios más básicos, si bien pueden existir variaciones, son:
- La disposición de una sala en el tanatorio.
- El funeral.
- El transporte del cuerpo en coche fúnebre.
- La inhumación o cremación del cadáver.
A estas prestaciones se le pueden sumar otras, sobre todo si el cliente desea un servicio más personal. Es entonces cuando la funeraria puede suministrar varios añadidos, como:
- La distribución de esquelas.
- El encargo de las coronas florales.
- La adquisición de una parcela en el cementerio.
- El acondicionamiento del cadáver (tanatopraxia).
- La inscripción de la lápida.
Aspectos que influyen en el precio
Como has podido comprobar, son diversas las acciones que comprenden los servicios funerarios. Pero, ¿cuánto cuesta un sepelio en nuestro país? Según datos de la OCU, en España este coste puede suponer entre 3.000€ y 5.000€.
¿Por qué esta diferencia de precios? Existen varios aspectos que tienen impacto en el importe final.
Ubicación
Aunque parece una obviedad, muchas veces se pasa por alto este factor. Y es que no es lo mismo que el servicio funerario tenga lugar en una gran ciudad, que en una capital de provincia o un pequeño pueblo. En estos tres casos el precio no será el mismo.
Ataúd
El tipo de madera, la calidad y estilo, así como el diseño y el acabo final elegidos marcan el precio que tendrá el ataúd. Se trata de uno de los elementos más caros del sepelio, cuyo precio oscila entre los 600€ y los 1.300€, aunque lo común es que se aproxime más a esta última cifra.
Tanatorio
El tanatorio es un lugar frío e inhóspito, principalmente por lo que allí se vive. Alquilar una de sus salas para despedir a un ser querido puede tener un precio inicial de unos quinientos euros durante las primeras 24 horas.
Coche fúnebre
El coche fúnebre es uno de los servicios funerarios básicos y su contratación es necesaria para poder efectuar el entierro. Su coste también está sujeto a cambios, ya que dependerá, en gran medida, del modelo de vehículo, su decoración interior y del tiempo que se requiera su servicio (por ejemplo, si se realiza una parada intermedia en un edificio religioso para formalizar la despedida).
Cementerio
La elección de la lápida y su diseño, la inhumación del cuerpo o el coste del alquiler del nicho (o panteón) son componentes que también afectarán al coste final. El precio medio de una lápida suele ser de 500 euros, mientras que el del nicho dependerá de su ubicación y el tiempo que vaya a estar alquilado.
¿Y respecto a la incineración?
Pese a las creencias comunes, la incineración no supone una rebaja sustancial en el coste respecto al sepelio. Aunque si optas por esta alternativa prescindirás de lápida y nicho, deberás adquirir igualmente un ataúd. Asimismo, el coste también se verá condicionado por la urna que elijas (en función del material y el diseño). Su precio final suele ser, de media, unos 3.617€.
Contrata un seguro de decesos y evita este mal trago
Existe una fórmula para evitar el suplicio que conlleva organizar el sepelio, especialmente tras el fallecimiento de un ser querido. Con la contratación de un seguro de decesos, el asegurado garantiza que, cuando fallezca, los servicios funerarios más básicos queden cubiertos.
De hecho, dadas sus prestaciones, cada vez son más las personas que adquieren una póliza de decesos o deciden combinarla con un seguro de vida. Así, sus familiares quedan protegidos ante su ausencia.